EJEMPLO/S
1. fue encontrarse con un nabo,
reduejo, por su ventura,
de muchos que habían sembrado.
Apenas lo vido estar cuando,
las hierbas soltando,
le asió de las verdes hojas
para poder arrancarlo.
Tal fuerza puso Teresa,
y tanto estuvo tirando,
que vino a caer de espaldas
con el nabo entre las manos.
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