EJEMPLO/S
Tú también te maravillas;
pero no es tu culpa leve,
pues cuando mi parte bebe
la tuya haciéndose astillas,
y a las nalgas y rodillas
responden la cama y tabla,
tú callas, tu parte habla
con aguanoso torrente;
que un frailazo omnipotente
hará mucho en levantar,
viendo mudo el descargar
y el cargador elocuente.
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