EJEMPLO/S
1. El amor de la doncella,
que fuere discreta y bella,
para el que gozare della
será gustoso aunque tardo:
¡ay Dios, quién hincase un dardo
en aquel venadico pardo!.
2. Si no empuña Mandricardo
dardo,
ni dispara en Yuestro Ormuz
arcabuz,
ni enciende, cuando os pertrecha,
mecha,
siempre andará con sospecha,
señora, que otro os dé asalto
un pobre que ve que es falto
de dardo, arcabuz y mecha.
Deja tu comentario