EJEMPLO/S
1. En fin, tú quieres, niño [amor], que me ataque,
y que, retieso y atacado, peque,
siendo curtido y afamado Jeque
de los que dan y toman el zumaque.
2. Y la niña pecadora,
harta de galopearse,
¡qué barata halla la cura,
qué fázil el rremendarse,
qué buen amigo es el vidrio,
la granada y el sumaque,
para quedar como nueba
al tienpo del entregarse!
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